Tuesday, February 28, 2012

Citoyens du monde

Al darse cuenta en la tienda estadounidense de que había pedido el zapato utilizando la talla mexicana, agradeció la comprensión de la dependienta con un "merci" muy del país donde estudiaba.

Confundida y un tanto avergonzada como estaba, no alcanzó a apreciar que se había convertido en la más bella metáfora de la globalización que jamás haya existido.

3 comments:

Mia Wallace said...

Llega un momento en el que hasta el mundo se queda pequeño.

maguspe said...

Un microrrelato perfecto.
Enhorabuena.

Alvagó said...

Sobre las llegadas de Mia...

I arriba un dia que sa vida és un teatre
que se diu felicitat,
primavera i trinaranjus
amb qui més has estimat,
te regal sa meva vida
i sense tu ja no me val.

... y muchas gracias, Maguspe. Tengo maestros inmejorables.