Wednesday, January 6, 2010

Diarios de aeropuerto

- Escribo desde el aeropuerto JFK de NYC (la avalancha de iniciales indica que ya estoy en territorio yanqui) sin saber muy bien la hora y el día que es. He dejado tras de mí más de nueve o diez horas de avión repartidas en dos viajes y he cruzado de lado a lado el Atlántico. Me quedan cuatro horas de espera hasta el avión a Washington DC y hora y pico de vuelo. Creo que lo de leer apuntes en el aeropuerto va a quedarse para otro momento en que mi cerebro no esté pidiendo a gritos algo de tranquilidad.
- La máquina que tengo detrás de mí vende libros como si fuesen chocolatinas. No sé si la pena que he sentido por los libros es debida a un elitismo rancio, a un conservadurismo literario que me desconcierta o a un romanticismo trasnochado para el que tampoco encuentro una argumentación convincente.
- La música me ayuda a establecer puentes entre las dos realidades que se solapan atropelladamente en estos momentos: España y los Estados Unidos. Los acordeones, las trompetas, los violines y las voces que me son tan familiares me recuerdan que, finalmente, hay cosas que no cambian en uno y otro lado del Atlántico. Los signos de continuidad son más bienvenidos que nunca. La chica de al lado sorbe su vaso de café Starbucks mientras yo miro con un punto de nostalgia el turrón que asoma por mi mochila.
- Me siento increíblemente privilegiado por estar rodeado de la gente a la que conozco en España y en Europa. Aquellos que siempre están ahí. A todos aquellos cuya compañía he podido disfrutar en esta –cortísima- estancia, muchas gracias. A todos aquellos (mucho más numerosos, me temo) a los que no he podido ver, les emplazo a una quedada veraniega mucho más tranquila y relajada de las que he podido organizar ahora. Bien mirado no queda tanto para junio, ¿no?


Canción del día/Chanson du jour

3 comments:

Mia Wallace said...

Welcome back!!! y me apunto a la quedada veraniega.

Un besazo enorme!!!

Saioa said...

¡¡Alvarito!!
Ya he visto la peli que me "mandaste"...¡jeje! Me ha gustado mucho, pero no he podido verla toda, porque el CD estaba rallado... pero me he imaginado lo que puede pasar y me ha gustado mucho :)
Ya nos ha dicho Agustina lo de los vuelos... Dile a tus padres que la proxima vez vayan ellos a verte :P
¡¡Un beso y suerte con los exámenes!!

Alvagó said...

Me alegro mucho de que te gustase, Saioa... Amélie es, sin duda, una de mis películas preferidas (además me ayudó a descubrir a mi músico favorito... ;) ).
Lo de los vuelos ha sido insufrible, pero ya estoy tranquilito en casa. Bueno... no tan tranquilito... el jueves, cuando haya pasado todos estos exámenes, otro gallo cantará de verdad... ;)

¡Muchos besos y recuerdos en casa!